EUROPA
PRESS
10 enero
2019
El
80% de los hombres adultos españoles tendrá obesidad o sobrepeso en 2030
Expertos apuestan por fijar impuestos a
los alimentos menos saludables y proteger los más sanos
Un total de 27 millones de adultos españoles en el año 2030,
el 80 por ciento de los hombres y el 55 por ciento de las mujeres de esta
franja de edad, presentará obesidad o sobrepeso, según ha estimado un estudio
liderado por investigadores del Institut Hospital del
Mar d'Investigacions Mèdiques
(IMIM) y médicos del Hospital del Mar.
La investigación, publicado en la 'Revista Española de
Cardiología (REC)', la publicación científica de la Sociedad Española de
Cardiología (SEC), ha cifrado en casi 2.000 millones de euros el sobrecoste que supone para el Sistema Nacional de Salud
(SNS) atender a las personas con sobrepeso, obesidad y obesidad mórbida. El
análisis supone la revisión más actualizada disponible, realizada a partir de
medio centenar de artículos publicados anteriormente.
La bibliografía revisada, que analiza los datos de más de
300.000 personas, ha permitido a los investigadores llevar a cabo el
seguimiento de la evolución de la prevalencia del sobrepeso y la obesidad en
España entre 1987 y 2014. A partir de estos resultados, se han realizado estimaciones
para los años 2006, 2016 y 2030. Según el estudio, en 2016 había en España unos
24 millones de casos de exceso de peso, lo que supone el 70 por ciento de la
población adulta española. Se trata de tres millones de personas más que en la
década anterior.
Unos datos que "están en la línea de lo que está
pasando en Europa, una línea de moderado crecimiento de la prevalencia del
exceso de peso en la población adulta", explica el primer firmante del
trabajo, Álvaro Hernáez, que participó en el Grupo de
Investigación en Epidemiología y Genética Cardiovascular del IMIM y es miembro
del CIBER de Fisiopatología de la Obesidad (CIBEROBN).
Se ha calculado que entre los años 1987 y 2014 se produjo un
incremento del sobrepeso anual del 0,28 por ciento en los hombres y del 0,10
por ciento en mujeres, y de la obesidad del 0,50 por ciento en hombres y el
0,25 por ciento en mujeres. El exceso de peso se mide a partir del índice de
masa corporal (IMC). Entre un índice de 25 y 30 se considera sobrepeso y a
partir de 30, obesidad.
Sobrecostes por el exceso de peso
El análisis de los datos también ha permitido hacer una
estimación del coste extra que supone para el SNS la atención a las personas
con exceso de peso. "Se trata de personas con más posibilidades de
incrementar el gasto sanitario a causa de las comorbilidades
que sufren, como las enfermedades cardiovasculares, la diabetes o el cáncer,
asociadas al sobrepeso y la obesidad", aclara Hernáez.
Según las estimaciones de los investigadores, en el año 2016
el coste directo respecto a 2006 se incrementó en 524 millones de euros, hasta
llegar a los 1.950 millones. Esta cifra es el 2 por ciento del presupuesto del
SNS en sanidad en el año 2015 (95.722 millones de euros). Para llegar a estas
conclusiones se ha utilizado una estimación de los sobrecostes
que va de los 40 a los 170 euros por año en función del peso y el sexo del
paciente.
De hecho, la investigación anterior del mismo grupo del IMIM
('estudio FRESCO'), destacaba que la obesidad y el sobrepeso multiplican las posibilidades
de sufrir cáncer o una enfermedad cardiovascular. En el caso de las mujeres
obesas, las posibilidades de desarrollar un cáncer se multiplican por 12 y por
cinco las de sufrir una enfermedad cardiovascular. En los hombres, la obesidad
incrementa dos veces el riesgo de sufrir cáncer. Además, el trabajo destacaba
que solo el 26 por ciento de los participantes tenía un peso normal, un dato
que concuerda con el nuevo trabajo.
Razones
Los investigadores apuntan a diversos motivos que explican
el crecimiento sostenido del sobrepeso en España. Patrones de alimentación
menos saludables, con un mayor consumo de productos industriales y una
reducción de la ingesta de fruta, verdura y legumbres, más sedentarismo, y el
incremento de la ocupación y del poder adquisitivo en el periodo estudiado,
podrían haber comportado la adquisición de patrones dietéticos menos
tradicionales, según los científicos.
Para romper esta tendencia, apuestan por intervenciones en
diferentes niveles, como nuevos impuestos a los alimentos menos saludables y
protección de los que componen las dietas sanas, además de políticas educativas
para promover buenos hábitos, como el ejercicio regular en las escuelas.
También sugieren que "convendría avanzar" en nuevas estrategias farmacológicas
cuando fuera necesario. Por ejemplo, apuntan que los planes de prevención de la
obesidad "podrían tener un fuerte impacto y ser muy rentables".
"El estudio ilustra, con muy poco margen de error, la
importancia de destinar cuanto antes el máximo de esfuerzos en revertir y
prevenir las futuras recurrencias de la creciente epidemia de sobrepeso y
obesidad en nuestra sociedad. Es la única manera de reducir los enormes costes
sociales, sanitarios y económicos que emergerán los próximos años", apunta
el investigador principal del estudio, Jaume Marrugat,
director del Programa de Epidemiología y Salud Pública del IMIM y miembro de la
SEC y del CIBER de Enfermedades Cardiovasculares (CIBERCV).